El experto asegura que la mirada de líderes tecnológicos está puesta sobre República Dominicana por su posición geopolítica interesante en Centroamérica y el Caribe

El progreso tecnológico y el conocimiento van de la mano para la consolidación de las Fintech en la región y, especialmente, la República Dominicana se ubica entre los 10 países con más empresas en esta categoría, la mayoría (65 %) están enfocadas en la inclusión financiera.

Estos datos son parte de los resultados de un estudio “Fintech en América Latina y el Caribe” publicado en el 2022, por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y además señala al país como pionero de una industria emergente. 

Para ampliar más este tema, Factor de Éxito entrevistó en esta oportunidad a Roberto Vargas, quien es de profesión economista y magíster en administración de negocios, con más de 17 años de experiencia en el área de finanzas, tanto en el sector público como privado. 

Además, es CEO y fundador de Betriax, una Fintech con un nuevo concepto en el mercado de cambio de divisas, el experto se autodefine como un innovador disruptivo. 

En la entrevista, Vargas explica cómo se benefician los países de América Latina ante el escenario de que una de cada cuatro Fintech del mundo, nace en la región y amplía por qué es necesario crear políticas nacionales de desarrollo de la industria Fintech.
    
En su paso por la República Dominicana, ¿cómo vio el ecosistema Fintech en el país? ¿Qué posición ocupa frente a los otros países?

La industria Fintech de República Dominicana ha avanzado tanto en el nivel de cooperación y colaboración con jugadores locales, así como en su proyección y fortalecimiento de lazos a nivel centroamericano e iberoamericano. Durante el CARICAM Fintech 2022, el evento icónico de Centroamérica y el Caribe, pude apreciar el interés de marcas globales, el desarrollo y consolidación de productos y servicios financieros Fintech y la voluntad política de reguladores y funcionarios estatales para impulsar el desarrollo de esta industria. 

Indudablemente, la región de Centroamérica y el Caribe cobrará más importancia a medida que la evidencia del progreso tecnológico responda a solucionar problemas de las vidas de las personas y del propio desarrollo empresarial, y que incidan sobre las variables claves de la economía, como la tasa de interés y el tipo de cambio. Dado que la industria Fintech es global, estimo que nuevos jugadores aparecerán en la escena nacional.

¿Es cierto que América Latina es la región más fértil para las Fintech? ¿Cómo esto impulsa el crecimiento económico de los países?

Una de cada cuatro fintech del mundo nace en nuestra región. Sin duda la mirada de los emprendedores tecnológicos-financieros se centra en cómo expandir los beneficios de sus innovaciones a más clientes. La mirada del “Sur” puede influir en las decisiones de estos líderes tecnológicos pues la pretensión de crear múltiples impactos en nuestros países y promover la Inclusión Financiera ha sido incentivada por los problemas que encontramos tanto en el sistema financiero tradicional, así como en la gestión y políticas públicas. También es cierto que, muchas veces, nuestros emprendedores encuentran maneras misteriosas para evolucionar con recursos limitados. Si existiesen políticas nacionales de desarrollo de la industria Fintech la velocidad para encontrar soluciones locales podría acelerarse y, por lo tanto, generar nuevas vetas de crecimiento y desarrollo económico. Aún está pendiente la investigación para medir con rigurosidad el impacto de los modelos Fintech en la velocidad del dinero y cómo esto no repercute en el nivel de precios, otro efecto de nuestra industria.

¿Cuáles son los grandes retos para que una Fintech crezca y se consolide en la región? ¿Y en República Dominicana?

Uno de los principales retos es el desarrollo tecnológico a medida que se valida el valor y rendimiento de un servicio con diferentes tipos de clientes, es decir, la capacidad para contratar talento tecnológico competitivo. El crecimiento natural y orgánico de las Fintech las llevan a considerar expandirse e internacionalizarse y, lógicamente, a acceder a capital para entrar en nuevos mercados y países. 

Un tercer reto es comprender, alimentar y corregir sus estrategias en el largo plazo. Como sabemos, los contextos económico y político actuales, inciden sobre la reconfiguración de escenarios y estrategias para ser sostenibles, así como en las reglas y estructuras donde desplegaremos energía, trabajo y recursos.

En el caso puntual de República Dominicana, es oportuno destacar que tiene una posición geopolítica interesante en Centroamérica y el Caribe. Considerar como un gran país a esta región puede atraer a más jugadores de otros países, lo que se traduce a más capital y despertar el apetito de inversionistas locales.

¿Cuál considera usted que es el área de oportunidades que se abrirá para las Fintech en el futuro? ¿Hacia dónde apunta el sector?

El tablero estratégico y las relaciones entre la banca y las Fintech ha cambiado en América Latina y el Caribe. Hoy, una Fintech (Nubank), por su valor en bolsa, ocupa el primer lugar por encima de los grandes bancos brasileros y mexicanos. La cooperación, la colaboración y la madurez en el relacionamiento de los bancos con las Fintech serán claves para expandir la frontera de posibilidades de innovación tecnológica-financiera. 

La Alianza Fintech Iberoamericana que comprende a unas 2600 Fintech de la región es la plataforma ideal para expandir las conexiones entre las Fintech de diferentes países, así como con sus gobiernos y asistirlos técnicamente. Evidentemente, nuestra industria impacta de forma positiva a otras industrias, por lo cual seremos testigos de múltiples innovaciones con corporaciones y todo tipo de empresas.

Cuéntenos sobre el lanzamiento de una Fintech que definirá un nuevo concepto en el mercado de cambio de divisas empresas, de la cual usted es líder.

El tipo de cambio es una de las variables que los negocios consideran en su desarrollo todos los días. Alcanzar nuevos niveles de eficiencia, es decir, mejores tipos de cambio, en un mercado alternativo, formal y bancarizado es la Misión de Betriax. A lo largo de los últimos dos años validamos con todos los stakeholders en este mercado cuáles son sus problemas y desafíos, y acotamos el universo de soluciones. 

En este sentido, una señal clara de la importancia del mercado es su tamaño. De acuerdo con el Bank for International Settlements, los cambios de divisas en los países de la Alianza del Pacífico (Perú, Colombia, Chile y México) alcanzaron USD 5,3T. Por lo tanto, generar ahorros en el sector empresarial significa un salto cuántico de competitividad, muy necesario en contextos internacionales volátiles, donde la sostenibilidad financiera es básica. 

En Betriax, esperamos incluir a jugadores globales y regionales de la industria financiera en nuestro modelo y empezar operaciones en el mercado en 2023, también con el apoyo de diversos gremios de empresarios y cámaras de comercio.

¿Considera que la innovación está ligada al hallazgo de oportunidades económicas?

En un primer momento se busca una oportunidad económica que pueda trasladarse masivamente a nuevos clientes y crecer exponencialmente en los mercados donde el dinero es el rey. Sin embargo, los emprendedores tecnológicos-financieros de América Latina dan muestras de generación de impacto al incluir a poblaciones subservidas y nuevos clientes (hasta hoy excluidos de los mercados financieros). Además, debemos considerar a la cooperación empresarial como un activo intangible que amplía las capacidades para encontrar nuevas soluciones con otros jugadores de los mercados. Debemos llevar la cooperación al siguiente nivel.

¿Qué papel juegan la creatividad y la curiosidad para que un emprendedor consiga mayores oportunidades?

Tanto la creatividad y la curiosidad son producto del ejercicio de nuestra Libertad. A lo largo de la Historia, la humanidad ha encontrado diferentes tipos de soluciones y respuestas a los desafíos en su evolución (hambre, transporte, seguridad, vivienda, entre otros). Asimismo, el desarrollo tecnológico necesita de un insumo fundamental que genera la humanidad: conocimiento. 

Procurar economías basadas en conocimiento es fundamental para superar el modelo de exportación de materias primas en nuestra región. Lo mismo sucede con las oportunidades de mercado. 

Por este motivo, habrá más oportunidades para cada uno dependiendo de las decisiones libres que tomemos ya sea como emprendedor, innovador, empresario o estudiante. Tomar mejores decisiones a lo largo del tiempo es un desafío continuo y hoy la tecnología permite “acercar” el futuro a nuestra niñez y juventud, crear más datos, información y conocimiento. Nunca es tarde.