El objetivo esencial es la garantía del servicio
La Superintendencia de Electricidad constituye el ente regulador del subsector eléctrico dominicano, y tiene la obligación de fiscalizar y supervisar el cumplimiento de las disposiciones legales, reglamentarias y la normativa técnica aplicables al subsector, en relación con el desarrollo de las actividades de generación, transmisión, distribución y comercialización de electricidad, y así mismo es responsable de establecer las tarifas y peajes sujetos a regulación de precios. Incluyendo en sus funciones, la promoción de la transición hacia una matriz energética más limpia en la República Dominicana
Con relación a las energías renovables, en concreto, están trabajando en la normativa para facilitar no solo la penetración de elementos de generación de fuentes renovables no convencionales, sino también de nuevas tecnologías como el almacenamiento de energía, lo que permitirá crear un ecosistema en el mercado energético que favorezca una gestión confiable de éste y, a la vez, se alcancen los objetivos de un 30 % de generación de energía sobre la base de fuentes renovables no convencionales.
“En la Superintendencia de Electricidad estamos promoviendo un esquema regulatorio que sea armonioso entre las necesidades crecientes de la sociedad y los compromisos y objetivos planteados por el presidente Luis Abinader en torno al desarrollo de las energías renovables”, señala Andrés Astacio Polanco, superintendente de esta institución.
En este sentido, y para impulsar proyectos de energía limpia y sostenible, la Superintendencia de Electricidad trabaja de la mano tanto con el sector público como con el privado, esencialmente dándoles previsibilidad a los mercados energéticos a través de regulaciones claras y transparentes. De igual manera, procuran alinear los intereses empresariales con el fin último que persigue todo regulador que es la garantía del servicio y la protección del usuario final.
La educación es prioridad
Afirma Astacio que también han puesto en marcha programas de educación y concienciación para informar a la ciudadanía sobre los beneficios de la energía renovable. “El pasado mes de marzo lanzamos nuestro programa de responsabilidad social SIEduca. Este tiene como objetivo sensibilizar sobre los desafíos energéticos y su impacto en el medio ambiente proporcionando espacios y oportunidades para que las personas puedan aprender sobre estos temas de manera efectiva y en todas las formas de aprendizaje posibles, independientemente de su nivel de educación o habilidades”.
Como uno de sus objetivos, el ente regulador procura instaurar una cultura sobre el valor y cuidado de la energía como un bien social, así como un compromiso con el medioambiente para crear un espacio positivo en la lucha contra el cambio climático.
“Nuestro taller educativo e interactivo “Yo Soy Energía” forma parte de este programa y aborda diversos aspectos relacionados con la electricidad, desde su historia hasta la importancia de su uso eficiente. Hemos estado llevando este taller a diferentes colegios y escuelas a nivel nacional, alcanzado a la fecha, en tan solo tres meses, impactar a más de 2,700 estudiantes. Utilizamos una metodología diferente, a través de la cual responden preguntas y trivias durante la actividad fomentando un ambiente de aprendizaje dinámico y divertido”, agrega Astacio.
Un camino de retos
En su misión de contribuir a la transición hacia una matriz energética más sostenible, la Superintendencia de Electricidad, enfrenta como reto principal el armonizar estas nuevas tecnologías, de forma tal que la gestión del ambiente eléctrico sea eficiente mientras atienden un esquema de creciente demanda energética por parte de la ciudadanía. “Todas las decisiones que tomemos, como regulador, deben ser enfocadas en la confiabilidad, razonabilidad de costos y eficiencia del servicio para el usuario final”, expresa Astacio.
De cara a los próximos años, uno de los grandes dilemas que debe enfrentar la SIE como un regulador es que los avances tecnológicos siempre irán delante de la regulación. Comenta Astacio: “En nuestro caso, como reguladores de la industria eléctrica, nuestro principal enfoque radica en identificar las tendencias tecnológicas a través de diálogos con los desarrolladores de dichas tecnologías, como hiciéramos en el primer Foro Empresarial de Iberoamérica, celebrado en Santo Domingo en febrero de este año, auspiciado por esta SIE y la Asociación Iberoamericana de Entidades Reguladoras de Energía (ARIAE). Una vez identificados estos avances, debemos modelar cómo encajarían estas nuevas tendencias tecnológicas en el mercado energético y en el objetivo esencial que hemos mencionado anteriormente, la garantía del servicio al usuario final”.
En el plano internacional y desde la perspectiva de la Superintendencia de Electricidad,
hoy por hoy, República Dominicana se ha convertido en el líder en penetración de energías renovables no convencionales en toda la región de Centroamérica y El Caribe. De hecho, dice Astacio, “somos el ejemplo a seguir sobre qué se debe hacer para lograr el desarrollo de esta incipiente industria. Prueba de ello, es que en los últimos tres años hemos sido el país de la región que más capacidad ha instalado en energías renovables no convencionales, tanto a escala mayorista como en generación distribuida”.
