El liderazgo efectivo requiere un equilibrio entre calidez y fortaleza. Nora Taboada de AFE-Liderazgo Consciente destaca la importancia de conectar genuinamente con el equipo (calidez) y mostrar integridad, agencia y competencia profesional (fortaleza). Los líderes cálidos pero carentes de fortaleza pueden provocar resentimiento, mientras que aquellos fuertes pero poco cálidos pueden ser respetados pero no necesariamente admirados. Taboada sugiere que el primer paso para generar un impacto positivo es mostrar calidez, lo que establece una base de confianza, seguido de la manifestación de fortaleza para trabajar en los aspectos técnicos y profesionales. Para generar calidez, recomienda utilizar un tono de voz adecuado, mostrar empatía y validar los sentimientos de los colaboradores. Por otro lado, para mejorar la fortaleza profesional, sugiere sentirse seguro, mantener una buena postura y mantenerse quieto durante reuniones o presentaciones. Estas cualidades combinadas pueden inspirar admiración y confianza en el liderazgo.